El día en el que el ídolo del fútbol francés David Ginola estuvo muerto 8 minutos
Corría el año 2016, David Ginola, mediático y legendario futbolista francés, se había retirado en el año 2002. ¿Quién le iba a decir que moriría jugando un partido de fútbol sala con unos amigos?
¿Pero si David Ginola está vivo?, te estarás preguntando. Y sí, lo está. Por suerte para él, 'tan sólo' estuvo muerto 8 minutos, como contó el propio ex futbolista a 'Daily Express'.
Todo sucedió en Mandelieu, muy cerca de la casa del ex futbolista, donde se celebraba un torneo de golf tras el cual, 15 años decidieron jugar un partido de fútbol sala en las instalaciones.
En pleno partido, David Ginola sufrió un paro cardiaco. Al principio, todos pensaron que era broma pero cuando vieron que no reaccionaba, rápidamente llamaron a emergencias.
Un helicóptero medicalizado llega a la montañosa instalación en 9 minutos. Durante ese tiempo, Frederic Mendy, amigo del ex futbolista, estuvo intentando reanimarle, pero sin éxito.
Es más, los paramédicos llegan a certificar la muerte de David Ginola, tras probar a reanimarle tres veces con el desfibrilador, pero sus amigos les piden que prueben más veces y el ex futbolista revive a la quinta.
En declaraciones a 'Daily Express', David Ginola reconoce que no entrenaba como cuando estaba en activo pero "me sentía bien y me cuidaba".
El pulso regresa y, rápidamente, le suben al helicóptero y se lo llevan a Munich, donde va directo al quirófano para una operación que se prolonga durante 6 horas y que le devuelve la vida.
"El médico que me operó me dijo que estuve clínicamente muerto durante 8 minutos. Si no llega a ser por la RCP de Mendy (en la foto), aunque hubiera sobrevivido, habría tenido lesiones cerebrales incompatibles con la vida", recuerda.
David Ginola recibió un cuádruple bypass de corazón y el cirujano quiso dejar claro al ex futbolista la suerte que tuvo aquel día. "Me dijo que 9 de cada 10 personas que pasa por esta experiencia, fallece. Fue un milagro sobrevivir".
Eso sí, entre las consecuencias de aquella experiencia, además de lo mencionado, a David Ginola le rompieron 5 costillas de la presión con la RCP que le tuvieron un mes alejado de su trabajo como comentarista deportivo televisivo.
Curiosamente, el destino quiso que ese mismo día conociera a su pareja, Maeva Denat, porque el universo siempre sabe cómo compensar el balance vital de las personas.