15 estrellas de fútbol cuyas carreras se fueron al traste por culpa de un partido

A pesar de años de duro trabajo, dedicación y entrenamiento, las carreras de los futbolistas pueden quedar marcadas por un solo partido. Aunque algunos jugadores brillan en los escenarios más importantes, otros se derrumban ante la presión y su reputación nunca se recompone. Desde errores garrafales a humillantes derrotas, estos 15 futbolistas vieron cómo sus carreras se iban al traste por culpa de un solo partido.

La fase de penaltis de Italia en los cuartos de final de la Eurocopa de 2016 contra Alemania fue el lugar donde Simone Zaza lanzó uno de los penaltis más raros de la historia. Su torpe y exagerada carrera acabaron mandando la bola muy por encima del larguero. El momento se convirtió en un meme en redes, y el futbolista nunca se recuperó del todo, convirtiéndose simplemente en un jugador más que nunca encontró su lugar.

Tras un año lesionado, Jonathan Woodgate finalmente debutó con el Real Madrid frente al Athletic de Bilbao en septiembre de 2005. Fue un desastre: marcó un gol en propia puerta y fue expulsado tras cometer dos faltas. Solo jugó nueve partidos de La Liga con el Madrid (según datos de Transfermarkt) antes de regresar a Inglaterra con sus sueños rotos antes casi de que se llegaran a cumplir.

Después de que Mark Bosnich se lesionara, el Manchester United fichó a Massimo Taibi; aunque el guardameta no duró mucho en el club. A pesar de convertirse en el hombre del partido en su debut contra el Liverpool, según BBC, al mes siguiente, en un empate 3-3 contra el Southhampton, Taibi dejó pasar el suave golpe de Matt Letissier entre sus manos y piernas, causando un gran ridículo. El United no tardó en deshacerse de él y tras solo cuatro partidos (según datos de Transfermarkt), el jugador fue vendido de nuevo a Italia.

Tras tener muchas dificultades desde que fuera fichado por el Chelsea por 58,50 millones de euros en enero de 2011, Fernando Torres tenía una oportunidad de oro para callar bocas contra el Manchester United. Tras superar a David De Gea, Torres falló un gol a puerta vacía. El fallo corrió como la pólvora, y aunque luego logró ganar trofeos con el Chelsea, este fue el momento en el que todos se dieron cuenta de que Torres no iba a recuperar su excelente forma del Liverpool.

Francia necesitaba solo empatar contra Bulgaria para clasificarse para el Mundial de 1994. En los últimos momentos, David Ginola, en lugar de llevar el balón hasta el córner, golpeó demasiado fuerte un pase de Eric Cantona, que permitió a Bulgaria un contrataque que acabó en un gol ganador. Francia no participó en la competición, y el entrenador, Gérard Houllier, culpó públicamente a Ginola por el fracaso, lo que terminó de forma inmediata su carrera como internacional con la selección. Desde entonces, a nivel de clubes, el jugador tampoco cumplió con las expectativas. Hasta ese momento, había flirteado con el FC Barcelona, Arsenal, Bayern de Múnich y Juventus. En lugar de eso, acabó en el Newcastle United, Tottenham Hotspur, Aston Villa y Everton.

En la final de la Copa EFL de 2019, Kepa Arrizabalaga del Chelsea se negó a ser sustituido antes de la tanda de penaltis, desafiando abiertamente al entrenador Maurizio Sarri. No consiguió parar los penaltis necesarios y el Chelsea perdió frente al Manchester City. El incidente manchó duramente su reputación, y lleva desde entonces sin jugar en Stamford Bridge, siendo cedido (sin éxito) al Real Madrid, y luego al Bournemouth.

Durante la Copa del Mundo de 1994, el gol en propia de Andrés Escobar contra los anfitriones estadounidenses provocó que Colombia saliera sorprendentemente del torneo en la fase de grupos. Desgraciadamente, solo algunos días después de volver a casa, fue disparado y asesinado en Medellín, algo que muchos creen fue un ajuste de cuentas. Su muerte sigue siendo uno de los momentos más oscuros de la historia del fútbol.

Tras una temporada asombrosa en la que desplazó a Simon Mignolet como número uno del Liverpool, todo se fue al traste para Loris Karius en la final de Champions de 2018, en la que el alemán cometió errores garrafales. Primero, su débil pase regaló a Karim Benzema un gol fácil para el Real Madrid, y después, acabó metiendo el tiro largo de Gareth Bale entre los dos palos. A pesar de haber sido diagnosticado con una conmoción cerebral, Karius nunca volvió a jugar para el Liverpool y pasó años cedido antes de desaparecer del fútbol de primer nivel.

El final de los play-off de la segunda división de Inglaterra del Coventry City contra el Luton Town acabó en desolación después de que el penalti en la fase última del encuentro de Fankaty Dabo se perdiera por encima del tercer poste, confirmando así que el Coventry no subiría a primera. A pesar de ser un jugador clave para su equipo hasta ese momento, no se renovó el contrato de Dabo después de su actuación en Wembley, y acabó marchándose al Forest Green. Allí, el entrenador Troy Deeny lo puso en el centro de mira y lo culpó del fracaso del equipo. Parece que al jugador ya solo le quedaba seguir cayendo en el fracaso más absoluto.

El arsenal viajó hasta Old Trafford en 2001 sin alguno de sus defensas claves, tirando de su defensa central del banquillo, Igor Stepanovs (izquierda). El Manchester United expuso las carencias del jugador, anotando seis goles en una derrota humillante por 6-1. Stepanovs, que había sido fichado como un sustituto a largo plazo para Tony Adams, nunca superó el trauma, y jugó solo esporádicamente hasta que abandonó el Arsenal en 2004.

Durante un partido de liga contra el FC Naftovyk-Ukrnafta Okhtyrka, Nery Castillo (izquierda), un joven talento de México, insistió en lanzar un penalti destinado para Cristiano Lucarelli. El jugador falló y el entrenador del Shakhtar, Mircea Lucescu (centro) entró en colera. Según recogía Sky Sports, Lucescu dijo: "Lo que ha hecho Castillo, desde el punto de vista profesional, nunca lo había visto antes en mi vida. Habrá repercusión contra Castillo". Tras lo ocurrido en Ucrania, la carrera de Castillo no remontó en otros equipos de Europa.

Durante años fue considerado uno de los defensas laterales mejores del mundo, pero Maicon del Inter de Milán vivió una noche de pesadilla contra Gareth Bale en la fase de grupos de la Champions de 2010. El lateral del Tottenham lo superó en incontables ocasiones rozando ya la humillación, logrando un hat-trick en San Siro que puso el marcador 4-3. A pesar de que los italianos ganaron el partido, la reputación de Maicon quedó manchada para siempre, dejando claro que no tenía lo suficiente para enfrentarse a grandes rivales en el uno contra uno.

El partido de inauguración de Inglaterra en el Mundial de 2010 contra Estados Unidos contó con un error garrafal de Rob Green, que permitió que el balón blandito de Clint Dempsey se le escapara de las manos. El partido finalizó 1-1, y Green fue sustituido en los siguientes encuentros por David James. Nunca volvió a recuperar su puesto como número uno para Inglaterra.

La histórica derrota de Brasil contra Alemania en la semifinal del Mundial de 2014 sigue siendo una de las derrotas más duras de la historia del fútbol. David Luiz, que portaba la capitanía en ausencia de Thiago Silva, fue un desastre, a menudo colocado fuera de su posición. A pesar de sus éxitos futuros a nivel de clubes, la humillación y dudas que generó en su habilidad para estar concentrado en el fútbol de primer nivel lo siguieron durante toda su carrera.

Antes de unirse al Liverpool por una cifra récord entonces para el club, EL-Hadji Diouf se había ganado una reputación como uno de los mejores talentos del fútbol africano gracias a su rendimiento asombroso con Senegal en el Mundial de 2002. Sin embargo, en Anfield, Diouf fue muy irregular, y su temperamento tumultuoso generó varios enfrentamientos con sus propios compañeros de equipo, incluyendo al capitán, Steven Gerrard. En la Copa de la UEFA de 2003, en un empate contra el Celtic, la carrera de Diouf dio un giro a peor, cuando al ser sustituido, escupió a un fan del Celtic. Para los aficionados del Liverpool, esa fue la gota que colmó el vaso, y uno de los motivos por los que acabó marchándose del equipo.