Adiós al sueño olímpico de Putin
Los Juegos de la Amistad, la alternativa a los Juegos Olímpicos que Vladimir Putin quería implantar, se han suspendido de manera indefinida.
Esta competición, nacida en el seno del Kremlin, buscaba recuperar el derecho de los deportistas rusos a participar en competiciones internacionales.
Conviene recordar que una de las primeras sanciones aplicadas a Rusia, tras iniciar la guerra contra Ucrania, fue excluir a la mayoría de sus deportistas de competiciones internacionales. Una prohibición que, obviamente, se mantiene vigente.
Estos Juegos de la Amistad buscaban la integración de los deportistas rusos pero la idea ya fracasó, toda vez que estaba previsto que se celebraran entre el 15 y el 29 de septiembre de 2024, cosa que no ocurrió. Llama la atención usar el término amistad en un escenario bélico como el que protagoniza Rusia desde principios de 2022.
La idea de Rusia era que la competición se celebrara entre Moscú y Yekaterimburgo pero la Asociación Internacional de la Amistad acabó suspendiendo el torneo, "tras mantener consultas con varios deportistas y federaciones internacionales", como señalaron en su momento en un comunicado.
El miedo a posibles sanciones, según recoge 'The Moscow Times', fue el principal motivo de que muchos deportistas se negaran a participar en una competición no amparada por el Comité Olímpico Internacional.
Tres meses más tarde, un decreto presidencial, publicado en el portal de información legal del Estado ruso, daba por clausurados unos Juegos de la Amistad que jamás llegaron a inaugurarse y que, según apuntan las circunstancias, jamás lo harán. O sí, quién sabe.
En su momento, Vladimir Putin presentó estos Juegos de la Amistad como la base para "nuevos formatos de cooperación deportiva internacional".
Desde la organización esperaban que participaran en torno a 5.500 deportistas en las 20 disciplinas olímpicas que habían preparado para esta primera edición.
La realidad fue bien distinta, y el apoyo a la iniciativa aún menor, a pesar de los 4.600 millones de rublos (50 millones de dólares) que Vladimir Putin aseguraba se iban a repartir entre los participantes.
La estafa de los Juegos Olímpicos que revelan algunos medallistas de París 2024