Al Atlético no le salen las cuentas tras el desastre en Champions: ¿adiós, Simeone, adiós?

El derbi reciente resultó ser un espejismo en una temporada que ha mostrado más virtudes que defectos para el Atlético de Madrid. Mientras la atención continúa centrada en los incidentes ocurridos en el Metropolitano y las subsiguientes sanciones, el equipo dirigido por Simeone experimentó un nuevo revés, esta vez en la Champions League.

El conjunto rojiblanco, que venía de salvar un punto sobre la bocina contra un Real Madrid en horas bajas, cayó goleado (4-0) ante un Benfica que se movió bajo la batuta del incansable Ángel Di María, quien a sus 36 años fue la estrella indiscutible de la noche perfecta de las 'Águilas'.

Con este resultado, el Atlético de Madrid igualó su peor derrota histórica entre todas las competiciones europeas, la tercera vez que encaja cuatro goles sin ver portería en la era Simeone en Champions League, algo que ya habían vivido en 2018 con el Borussia Dortmund y en 2020 con el Bayern Múnich.

Simeone sacó de inicio a su once de gala al césped del estadio Da Luz, pero el único que cumplió fue Jan Oblak a pesar de encajar cuatro tantos. Tal fue el esperpento, que el técnico argentino llegó incluso a prescindir de tres de sus grandes baluartes - Koke, De Paul y Griezmann- para el segundo periodo.

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Lo peor del Atlético es que los dos planes del técnico argentino -antes y después de los cambios- no funcionaron. Y así lo dejó claro en rueda de prensa: "Hay noches que no son buenas y toca aceptarlas e intentar aprender de lo que nos tocó pasar hoy y recuperar energía para el partido del domingo".

El juego y los goles los pusieron los lisboetas, que demostraron al Atlético de Madrid que la Champions League -aunque se cambie el formato- nada tiene que ver con La Liga. Así, a lo largo de los 90 minutos vieron como Di María y Kokcu de penalti, Akturkoglu y Bah hicieron trizas a los rojiblancos con este serio correctivo.

"El partido no fue bueno, no lo gestionamos bien. (…) Jugaron con contundencia en cada pasaje del partido y tuvo posibilidades de gol. Veníamos haciendo un trabajo muy bueno y hoy apareció el partido que uno no quiere que aparezca", destacó Simeone en el postpartido ante los micrófonos del club rojiblanco.

"No salió lo que queríamos, ellos fueron mejores que nosotros en todo momento, tanto en el primer tiempo como en el segundo. La responsabilidad es mía por no generar lo que queríamos, el penalti llegó muy pronto en la segunda parte y no pudimos generarlo", añadió en Movistar haciendo autocrítica sobre su puesta en escena sobre el terreno de juego.

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Otro que hizo autocrítica fue el guardameta Jan Oblak en declaraciones a Movistar, asegurando que "no hemos estado y da pena perder así. Dejar esta imagen no es nada bueno y no se puede decir mucho más. (…) Pasan partidos así, pero no podemos permitirnos porque dejamos una imagen fea".

En defensa, Giménez hizo el su peor partido de la temporada, Reinildo estuvo desaparecido y a Witsel no se le vio fino. Notaron mucho la ausencia de Robin Le Normand y sufrieron la lesión de Marcos Llorente, que fue sustituido en el minuto 32 por Nahuel Molina, inoperante tanto en defensa como en ataque.

En el centro del campo estuvieron muy imprecisos y perdiendo demasiados balones dos de los 'castigados' por Simeone, Koke y De Paul, a los que sustituyeron un canterano, Javi Serrano -que no intentó sin suerte- y Conor Gallagher, que firmó su peor partido desde que llegó al Atlético, provocando un penalti y cometiendo un garrafal fallo en el gol de Bah.

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Delante, Lino fue de lo poco salvable, especialmente por ser el más activo y peligroso en el primer tiempo, pero no cumplieron ni Correa -habitual suplente- y, sobre todo, Julián Álvarez, fichaje estrella de los colchoneros, pero que sigue sin encontrar su sitio para brillar. Sorloth, que salió en el segundo tiempo, tampoco sirvió como revulsivo.

En una temporada en la que el Atlético de Madrid ha sido el equipo que más se ha gastado en fichajes, un total de 185 millones repartidos en los 75 millones más 20 en variables de Julián Álvarez; los 42,5 de Conor Gallagher, los 34,5 de Robin Le Normand y los 32 de Alexander Sorloth, se esperaba mucho más de un equipo que, hasta ahora, está decepcionando.

En Liga marchan cuartos, por detrás de Barcelona, Real Madrid y Villarreal y ya han perdido 8 puntos (de cuatro empates) en 8 jornadas disputadas: contra el conjunto blanco en su último partido, contra el 'Submarino Amarillo', el Espanyol y el Rayo Vallecano.

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Pero lo peor no son los resultados, sino la imagen que están dando en todos sus partidos, donde no demuestran una superioridad clara sobre sus rivales, donde empiezan mal en las primeras partes y, a veces, no son capaces de reaccionar (como hicieron con el Real Madrid en el minuto 95).

En los medios las críticas tras el partido fueron duras, empezando por ex jugadores rojiblancos como Kiko Narváez, quien puso el foco en Simeone: "Veo muchos cambios de sistema y no termino de ver convencido a día de hoy al Atlético de Madrid. A Julián Álvarez no lo veo como extremo por la izquierda, sino que juega mucho mejor con dos puntas. Ese chico está desperdiciado".

También periodistas como Josep Pedrerol en ‘El Chiringuito’, mucho más crítico: "En el Atlético de Madrid, el Cholo haciendo inventos. El Cholo ha hecho de Cholo. Vas perdiendo y quitas al delantero, vas perdiendo y quitas a otro delantero. Eso es el Cholo, pero como tiene la capacidad de ser intocable mientras Gil Marín o Cerezo no se atreven a decir ni mu, pues ahí va a seguir los próximos 48 años".

El resumen de este partido es el resumen de lo que llevamos de campaña en el Atlético de Madrid y ha sido el último aviso (contundente) para que tanto Simeone como sus jugadores den una vuelta de tuerca a la situación, sino quieren repetir otro año para olvidar.

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