La increíble historia de superación de Federico Gatti: de albañil a héroe italiano
La historia de Federico Gatti bien podría ser una historia sacada de una película. Y es que el conocido central italiano pasó de trabajar como albañil a triunfar en la Juventus.
Gatti nació en Rivoli, un pequeño pueblo al oeste de Turín donde jugaba al fútbol a diario. Se incorporó al Pavarolo con solo 17 años, un equipo de barrio donde empezó todo.
En 2020, en plena pandemia, Gatti se quedó sin contrato y, de un día para otro, se quedó sin equipo. El central italiano se vio obligado a seguir trabajando como albañil ya que ningún otro equipo le ofrecía un contrato decente.
Gatti se unió al Verbania en 2018, como semiprofesional, pero tendría dificultades para ganarse la vida jugando al fútbol. Durante el día trabajaba en un supermercado y, cuando acababa su turno, entrenaba.
Después una gran temporada con el Verbania, Gatti saltó a la Serie C (la tercera división italiana) jugando una excelente temporada con el Pro Patria. Se convirtió en un titular indiscutible, realizando grandes actuaciones defensivas.
Gatti permanecería en las divisiones inferiores italianas durante un par de temporadas hasta que recibió una llamada de Fabio Grosso, exjugador de la Juventus y campeón de la Copa del Mundo de 2006. En 2022, el Frosinone, equipo entrenado por Fabio Grosso en Serie B, fichó a Gatti.
El valor del joven central se disparó de 55.000 euros a 5,5 millones en solo dos años. Se llegó a tantear opciones de compra con el Milán, pero en cuanto llamó la Juventus, Gatti lo tuvo claro. Justo en ese momento la Juventus estaba buscando centrales en el mercado europeo y Gatti se perfilaba como la mejor opción.
Giorgio Chiellini estaba terminando su última temporada en la 'Veccia Signora' y la Juventus buscaba desesperadamente a un jugador que encajara en un perfil similar. Gatti fue el elegido. Sus estadísticas demostraban que era un digno heredero del trono de Chiellini.
Todo estaba cambiando muy rápido para Gatti. Su ambición reflejaría su pasión sobre el terreno de juego. Tenía un objetivo: conseguir su sueño y poder vivir del fútbol profesional.
"Yo trabajaba en los mercados para descargar cajas de frutas y verduras. Hace dos años era albañil e instalaba ventanas, por las tardes entrenaba en campos de barro... Todo era parte del camino", compartió Gatti a pocos días después de fichar por la Juventus.
El club turinés pagó un total de 5,2 millones de euros por Gatti y desde entonces se ha convertido en una revelación en la Serie A. Marcó su primer gol ante el Sporting CP, durante los cuartos de final de la Europa League.
"Es una esponja, absorbe todo y entiende bien el fútbol. Él [Gatti] todavía es joven y tiene mucho que aprender, pero tiene apetito", dijo Allegri durante una conferencia de prensa posterior al partido.
Fue el propio Gatti quien marcó el 1-0 decisivo en la ida ante el Sevilla. Marcó un cabezazo en el minuto 97 que puso a la Juventus por delante en la eliminatoria.
"He cambiado mucho, aquí hay que cuidar cada detalle, dentro y fuera del campo. Está claro que todo lleva su tiempo, pero con la confianza que me están dando el entrenador, el club y mis compañeros, aquí solo puedo crecer," dijo Gatti durante una rueda de prensa.
Su buen rendimiento defensivo y su determinación son ejemplares. A Gatti se le suele comparar con Moreno Torricelli, un exdefensor que jugó en la Juventus durante la década de los 90.
Al igual que Gatti, Torricelli vivió dificultades similares, trabajando en trabajos mal pagados justo antes de que la Juventus lo fichara de la Caratese en la Serie D.
Federico Gatti es un ejemplo de superación y confianza en sí mismo que inspira a jóvenes futbolistas que sueñan con vivir de su pasión. ¡A por todas, Gatti!