En silla de ruedas: preocupación por el estado de salud de Anna Kournikova

La que fuera una de las grandes estrellas del tenis femenino del ayer, Anna Kournikova, ha sido vista en público (llevaba cerca de dos años sin ser fotografiada por los medios) desplazándose en silla de ruedas. Muchos son los que, ahora, se preguntan qué le ha pasado a la extenista y se preocupan por su estado de salud.

La extenista de 43 años, que se ha mantenido alejada de la opinión pública desde que se retirara, fue fotografiada en las tiendas de Bal Harbour, en Miami, Florida, acompaña por sus hijas Lucy y Mary, además de amigos, según informaba The New York Post.

La verdad sobre Anna Kournikova

Kournikova llevaba una bota ortopédica en un pie, lo que ha hecho aumentar las especulaciones sobre su estado de salud.

Kournikova, una de las caras más reconocibles del tenis, se retiró con tan solo 21 años por culpa de lesiones crónicas, que incluían problemas graves en su espalda.

A pesar de no haber ganado nunca un título individual del WTA Tour, la tenista fue una jugadora dominante en dobles, alcanzado el puesto número 1 del mundo y ganando múltiples torneos de Grand Slam, junto a Martina Hingis.

Fuera de las pistas de competición, su estilo llamativo y personalidad arrebatadora la ayudaron a convertirse en una de las celebridades más grandes del deporte de finales de los 90 y principios de los 2000.

Desde que diera un paso atrás en el deporte, Kournikova ha vivido una vida tranquila con su pareja de siempre, el cantante Enrique Iglesias. La pareja lleva unida desde 2001 y tiene tres hijos: los gemelos Lucy y Nicholas, de 7 años, y su hija más joven, Mary, de 4, según informaba The Independent.

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A pesar de su privacidad notoria, Kournikova muestra de manera ocasional imágenes de su vida familiar en redes sociales, a menudo publicando momentos enternecedores con sus hijos e Iglesias.

La pareja mantiene su vida personal tan en privado, que se desconoce de manera oficial si han llegado a contraer matrimonio en algún momento de las más de dos décadas que han compartido juntos.

La naturaleza de la lesión actual de Kournikova sigue siendo una incógnita, ya que ni ella ni ninguno de sus representantes ha publicado oficialmente un comunicado sobre su salud, según señalaba The New York Post.

Sin embargo, por lo que se puede observar de su bota ortopédica, parece que se trate solo de un problema temporal en el pie y que no está relacionado con la lesión de espalda que la obligó a retirarse prematuramente.

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Su aparición pública también ha reactivado el interés sobre su impacto en el mundo del deporte. Kournikova no solo era una tenista de mucho talento, sino que también fue un icono global que ayudó a impulsar la relevancia del tenis femenino.

Kournikova jugó un papel importante en el aumento de la comercialización del deporte gracias a sus acuerdos lucrativos con relevantes marcas y atrayendo la atención de los espectadores al WTA Tour en aquel momento, dando más alas a la popularidad del tenis femenino.