Escándalo en el Villarreal vs Barça: polémicas decisiones arbitrales beneficiaron a los de Hansi Flick

El del estadio de La Cerámica no fue el mejor partido del Barça de Hansi Flick en lo que va de temporada, algo que no impidió que volviera a demostrar una jornada más su eficacia goleadora para arrasar 1-5 al conjunto amarillo. Eso sí, el encuentro no estuvo exento de polémica por una serie de decisiones arbitrales que beneficiaron a los blaugranas.

El equipo de Marcelino García Toral plantó cara en todo momento al conjunto catalán que, sin embargo, terminó superando con creces a su rival. Cinco goles frente a uno del Villarreal, pero, eso sí, en medio de ese ‘festival’… ¡tres goles anulados por fueras de juego milimétricos al equipo castellonense!

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El primero de ellos llegaría en el minuto 7 de partido, aún con el 0-0 en el marcador. Ambos conjuntos habían arrancado el encuentro a un gran nivel y a un ritmo altísimo, pero fue el equipo amarillo el que se adelantaba en el marcador con un buen tanto de vaselina de Yéremi Pino tras un pase al espacio de su compañero Álex Baena.

En este caso, los jugadores del Villarreal protestaron al árbitro Mateo Busquets Ferrer su decisión, pero parece claro que el futbolista canario se encontraba adelantado en el momento en el que Baena le daba es magnífica asistencia desde el centro del campo que lo dejaba solo ante Marc-André ter Stegen.

La jugada más polémica del partido llegaría apenas se había reanudado el partido tras el descanso. En ese momento, Álex Baena metía otro magnífico balón en profundidad, esta vez para el delantero franco-marfileño Nicolas Pépé, que, tras una carrera hacia el área superando a los defensores azulgranas, batía al guardameta Iñaki Peña de tiro cruzado.

Busquets Ferrer, después de que el linier levantara el banderín y, posteriormente, a instancias del VAR, también anularía este segundo tanto que, en aquel momento, cuando el Villarreal estaba jugando sus mejores minutos, suponía el empate 2-2, que podría haberlos dado alas desde entonces y hasta el final del partido.

La confusión en torno a esta jugada -cuestión muy criticada desde el Villarreal- es que en las repeticiones que se ofrecieron en el momento, tanto las imágenes televisivas de DAZN, como las del VAR, no eran nada claras ni rigurosas y no dejaban evidencia de que en la jugada se hubiera producido fuera de juego.

El juego se paró para la revisión de la jugada en el VAR, algo que el colegiado del partido hizo durante menos de un minuto, poco tiempo en comparación con otras ocasiones en las que otros de sus compañeros recurren a este sistema de video con el que clarificar jugadas dudosas.

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En el programa 'El Chiringuito', el periodista José Luis Sánchez hizo referencia a esto mostrándose sorprendido por la rapidez en la decisión de Busquets Ferrer y la "celeridad" de Iglesias Villanueva a los mandos del VAR: "¡5 segundos en descartar un fuera de juego!", criticó.

Busquets Ferrer no lo dudo, anuló el tanto y el juego se reanudó como si nada hubiera pasado. Sin embargo, minutos después de esta decisión, DAZN ofrecía nuevas imágenes de la jugada parta demostrar que sí había sido fuera de juego en las que se veía a los defensores y a Pepé, pero no el momento en el que Baena realiza el pase al atacante amarillo.

La posición del delantero (Pépé) y el defensa (Íñigo Martínez) era tan justa que, dependiendo del frame del vídeo que se escogiera, podía ser fuera de juego o no. Una cuestión que acrecienta las dudas en torno a la decisión tomada y la velocidad con la que se tomó por parte del colegiado.

La jugada ha suscitado enormes críticas y dudas por el funcionamiento del fuera de juego semiautomático, una tecnología que está funcionando muy bien en la Champions League y cuyas imágenes suelen ser instantáneas, pero que en esta polémica del Villarreal vs. Barça tardó mucho y con imágenes en las que no se podía ver el momento del pase.

Apenas unos minutos después, en el 57, un fallo defensivo del Villarreal supondría el 1-3 del Barcelona, obra de Pablo Torre, una jugada que acabaría de sacar a los jugadores de Marcelino del encuentro en un momento en el que ya empezaron a dar muestras de desgaste por el trabajo realizado sobre el terreno de juego.

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Aún con el 1-3, Barry de cabeza volvería a anotar para el Villarreal, otro importante tanto que suponía volver a meterse en el partido, pero que el colegiado también anulaba, de nuevo en una jugada en la que se sancionó a los castellonenses por milímetros. Aquello terminó de minar al equipo, que terminaría recibiendo dos tantos más de Raphinha.

El técnico del Villarreal, Marcelino, que en la rueda de prensa post partido aseguró que las decisiones arbitrales no habían influido en el resultado, sí criticó por otro lado que, en esta temporada, los árbitros estén pitando "penaltitos" con apenas contacto entre los futbolistas, algo que sí sancionaron en su contra (con el penalti herrado por Lewandowski).

"Un penalti es un penalti y el VAR tiene que llamar al árbitro y si no lo hace pues no es penalti. ¿Qué vamos a hacer jugar con una pierna al fútbol y cortarnos la otra? Este es un deporte en el que las extremidades ayudan a la coordinación y a movernos", criticó.

Sea como sea, el encuentro terminó con un duro correctivo a un Villarreal que no marcha nada mal en el campeonato, en puesto europeos y a solo 3 puntos del segundo (Real Madrid), mientras que el Barça continua imparable e invicto, con 18 puntos de 18 posibles.

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