Qué pasó con el polémico boxeador Poli Díaz

18 de marzo de 2022. Titular del diario El País: 'Poli Díaz, condenado a dos años de cárcel por maltratar a su pareja'. El púgil cumplía prisión preventiva desde un año antes en la cárcel del Salto del Negro. En el artículo de El País se citaba, además, una investigación pendiente por amenazas a la jueza que había llevado su caso.

Policarpo Díaz Arévalo fue una estrella del boxeo, uno de los grandes, pero su gloria resultó efímera. Apenas unos años de fulgor en una biografía de miseria, violencia y adicciones.

En 2021 se habló de un posible regreso al ring de quien fuera Potro de Vallecas. También de una serie de televisión sobre su vida. La cárcel interrumpió los planes de Poli.

Un cúmulo de violencia sin freno fuera del ring, una vida en los márgenes. La incapacidad para regresar a sus años mejores, que fueron un pequeño paréntesis en una existencia trufada de malos momentos. Porque ¿cuáles son los orígenes del Potro de Vallecas?

Poli Díaz (nacido en Almería en 1967) llegó muy niño con su familia al madrileño barrio de Vallecas y allí se convirtió en un chaval que recogía cartones para sacarse un dinero hasta que, con 15 años, comenzó su idilio con el boxeo. Debutó peleando con 19, el 5 de julo de 1986.

Su carrera como boxeador fue todo un éxito: 44 victorias (28 por nocaut) por solo 3 derrotas. Se convirtió en un fenómeno social y en uno de los referentes del boxeo en España y mantuvo un récord de imbatibilidad durante cinco años hasta que cayó ante el estadounidense Pernell Whitaker en 1991 en un combate por el título mundial del peso ligero.

Fue a partir de entonces cuando comenzó su declive. Estuvo dos años sin subir a un ring y, mientras, despilfarró todo el dinero que había ganado en fiestas y gastos absurdos y, más adelante, comenzó a consumir sustancias que le llevaron por mal camino.

Acabaría dejando el boxeo en 1997. Hizo dos películas de cine para adultos, empeoró su dependencia y, según recordaba Elena Sanz Bartolomé en una crónica de El Confidencial, cayó al escalafón más bajo en el mundo de los adictos: "Su caída fue dolorosa hasta el punto de llegar a vivir en una tienda de campaña en La Rosilla para no tener que trasladarse todos los días hasta ese poblado para consumir su dosis diaria de heroína".

Entre 1999 y 2001 tuvo un fugaz regreso al mundo del boxeo de la mano de una promotora con la que se trasladó a L'Hospitalet de Llobregat. Durante ese tiempo peleó en cinco combates, ganó un título menor en peso wélter y se retiró con una victoria, el 16 de marzo de 2001, frente a Luis Cardozo ‘Robocop’.

A partir de ese momento, se centró en su lucha contra sus adicciones, recibiendo en un centro un tratamiento con metadona, y trabajó por reinsertarse en la sociedad a través de un programa que le colocó laboralmente como jardinero y en el mundo de la construcción.

Sin embargo, sus problemas continuaron. Según publicó el diario El Mundo, en su cuenta de incidentes se incluye una condena en 203 por agresión, una puñalada recibida en la espalda en 2012 y un presunto intento de agresión del púgil a unos agentes de policía en 2014.

El que fuera boxeador de moda en los 80 y 90, que alternaba con celebridades y era todo un icono, tuvo muy pronto que volver a su barrio, Vallecas, a vivir en unas condiciones miserables.

De la mano de su mánager y promotor Antonio Ricobaldi, Díaz se estaba preparando desde principios de 2021 en el gimnasio para volver a vivir en el mes de noviembre otra gran noche de boxeo en el WiZink Center de Madrid. Pero, de nuevo sus problemas legales, le alejaron de lo que hubiera podido ser su triunfal regreso.

Camino de los 60 años, ¿cuál es el futuro de Poli Díaz? Difícil que pueda regresar a la gloria pugilística. Y, según han publicado diferentes medios, su salud no es precisamente buena. La vida, finalmente, tumbó en la lona a Poli. ¿Podrá levantarse y seguir peleando?

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