Auge y caída de un ídolo futbolero de los 90: dura historia de Juanele
Comenzó su carrera como futbolista en el Sporting de Gijón y, durante 15 años deslumbró con sus filigranas en Primera División con el Tenerife y el Real Zaragoza. Fue uno de los atacantes más brillantes de La Liga en los 90, pero la carrera de Juanele terminó abruptamente, dando paso a una nueva y dura etapa de su vida.
En sus años en la élite, fue parte importante del mejor Tenerife de la historia y llegó incluso a vestir la camiseta de la selección española y a acudir al Mundial de Estados Unidos 1994 (aunque no llegó a jugar). Terminaría ganando dos Copas del Rey con el Zaragoza, pero fue en la capital aragonesa donde empezó su particular vía crucis.
Entre 2002 y 2004, el conjunto zaragocista estuvo dirigido desde el banquillo por el catalán Paco Flores, un técnico que no confiaba en Juanele y que llegó, incluso, a no le dejaba entrenar con el equipo. Esa relación, como contó el ex futbolista al diario Marca, junto a problemas familiares que vivió entonces, lo fueron minando poco a poco.
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Fue entonces cuando cayó en la depresión, como también explicó en otra entrevista para la Cadena SER con motivo de la publicación de ‘Mi verdad’ (2024), su autobiografía, un problema que derivó en otro aún peor. Y es que cuando acudió a tratarse, los médicos le detectaron que padecía trastorno bipolar, lo que le obligó a comenzar a medicarse.
"Los médicos me decían que estuviera tranquilo, que tomase la medicación, pero no es fácil", explicaba Juanele en la Cadena SER. Aquel cambio supuso un cambio radical en su vida que, según sus propias palabras, le costó asimilar en aquel momento, especialmente cuando pasó a convertirse en la razón que le obligó a abandonar el mundo del fútbol.
En sus años como futbolista le tocó además lidiar con las acusaciones de ser un auténtico amante de la noche, cuestionando su profesionalidad como futbolista, algo que no duda en desmentir en su libro: "Yo salía de fiesta como salían todos mis compañeros. Salíamos al acabar un partido, cuando nos daban días libres... Salía como todos. (…) Nunca he salido antes de un partido".
Tras su paso por el Zaragoza, el mundo del fútbol le llevó a jugar a otros equipos menores de Tercera División y categorías regionales, como Terrasa, Real Avilés, Atlético Camocha y CD Roces, donde se retiró con 36 años en 2007.
Pero sus momentos más polémicos los vivió entre rejas, porque Juanele pasó por prisión hasta en dos ocasiones, la primera de ellas tres meses por empujar a un hombre en un bar y la segunda durante todo un año por pinchar las ruedas del coche a su ex pareja.
"Mi paso por la cárcel no me sirvió para nada. No hice ni un amigo. No se lo deseo a nadie. Eso sí, no me sentí solo. Mis amigos fueron a visitarme y hablaba con mi hija todos los días. Hay errores que no hay que cometer y hay que dejarlos atrás y olvidarlos", recordaba en su entrevista con la Cadena SER.
Su último y no menos triste episodio lo vivió en 2023, cuando sufrió un ictus del que, afortunadamente, pudo recuperarse sin mayores secuelas. Lo contó en Marca, donde destacó que iba mejorando poco a poco después de salir de la residencia en la que estuvo internado para recuperarse.
"Estuve 15 años en la élite y en el plano personal me sucedieron cosas que ya pasaron. (…) Hice cosas muy buenas y alguna mala", recalcaba el futbolista sobre una intensa vida en al que, después de brillar sobre el césped en los campos de Primera, vivió un cambio radical que lo torció todo para siempre.
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