Tensión en la cancha: futbolistas y entrenadores cuya relación fue más allá del odio

En el mundo del fútbol, es común que surjan tensiones entre jugadores y entrenadores. En ocasiones, algunos técnicos pueden percibir que detentan un gran poder, lo que puede provocar que los jugadores desarrollen sentimientos de envidia y oposición hacia su autoridad.

Jadon Sancho fue fichado por el Manchester United, proveniente del Borussia Dortmund, por una cantidad significativa de dinero en 2021, pero cuando Erik ten Hag llegó al equipo en 2022, Sancho desapareció del equipo. Después de que el Manchester United perdiera 3-1 frente al Arsenal, Ten Hag explicó que había dejado fuera a Sancho por su entrenamiento deficiente.

Sancho respondió a las declaraciones de Ten Hag diciendo: "Creo que hay otras razones, pero no voy a meterme en eso; llevo siendo la cabeza de turco durante mucho tiempo, ¡y no es justo! Lo único que quiero hacer es jugar al fútbol con una sonrisa en mi cara y contribuir a mi equipo". El jugador inglés nunca volvió al equipo de Ten Hag y fue cedido al Dortmund; ahora se encuentra jugando para el Chelsea.

Siendo dos estrellas con dos grandes egos, Jose Mourinho y Paul Pogba chocaban regularmente en el Manchester United; Pogba llegó a decir que su relación era como la de "un novio y una novia".

Al inicio de la temporada 2018/19, Mourinho sentaba de forma regular a Pogba en el banquillo por baja forma y por considerarlo el 'virus' del vestuario. El jugador francés también cuestionó las decisiones tácticas del entrenador portugués: "Esto es Old Trafford; venimos aquí a atacar". Pogba no volvió a ser titular hasta que Ole Gunnar Solksjaer tomó las riendas del equipo.

Cuando Ruud Gullit llegó como entrenador del Newcastle United en 1999, el holandés dejó fuera a los jugadores más experimentados y trajo a jugadores más jóvenes. Un jugador clave que dejó fuera fue el capitán de Inglaterra, Alan Shearer. La guerra entre ambos recibió el nombre de 'La Batalla de los Alfas'.

Según la exestrella del Newscastle, Kieran Dyer: "A Shearer no le gustaba (Gullit), y él no valoraba a Shearer. Veía todo lo que adulaban a Shearer, y decía 'No es ni la mitad de bueno de lo que yo era'". En agosto de 1999, Gullit dejó fuera del derbi contra el Sunderland a Shearer. El Newscastle perdió el partido, marcando así el inicio del fin para Gullit.

En 2002, el icono del fútbol Cristiano Ronaldo se quejó de manera muy sonada del entrenador del Manchester United, Erik ten Hag: "No le tengo ningún respeto porque él no me muestra ningún respeto a mí".

En octubre de 2022, Ten Hag se atrevió a poner a Ronaldo en el banquillo en un partido en el que el equipo perdió por 6-3 contra el Manchester City. La relación entre ambos empeoró, y en una ocasión, Ronaldo se negó a salir al campo a jugar como suplente y se marchó por el túnel de vestuario durante la segunda mitad de un partido en el que el United ganaba por 2-0 al Tottenham.

David Moyes fue clave en el debut de Wayne Rooney en la Premier League con el Everton. Sin embargo, en 2004, Rooney logró un fichaje muy sonado con el Manchester United, lo que dio inicio a una mala relación entre ambos.

Moyes denunció a Rooney por calumnias en 2008 después de afirmar en su autobiografía que Rooney había filtrado información confidencial a la prensa sobre su deseo de marcharse al Everton. Rooney admitió haber sido duro con Moyes por cómo le había tratado en el Everton, pero más tarde reconoció haber sido un inmaduro y no haber tenido razón.

Una disputa en 2002 entre Roy Keane y Mick McCarthy le quitó a Keane la oportunidad de jugar para su país en la Copa del Mundo de 2002 en Corea del Sur y Japón. La leyenda del Manchester United quedó sorprendido por las terribles condiciones en las que el equipo irlandés tenía que entrenar durante la preparación para el torneo.

En una actitud muy característica de Roy Keane, este reprendió muy duramente a McCarthy diciendo: "Mick, eres un mentiroso… eres un ca**** de mi****. No eras digno de mención ni como jugador, ni como entrenador, ni como persona". Kaeane abandonó la concentración para el torneo y no jugó su segundo Mundial.

Alan Shearer se puso a las riendas del Newcastle United para sacarlo a flote en los últimos ocho partidos de la temporada 2008/09. Shearer tuvo que lidiar con el temperamento de su centrocampista, Joey Barton, quien recibió una tarjeta roja contra el Liverpool en uno de los últimos partidos de la temporada.

Sin Barton, el Newcastle descendió a segunda, y Shearer estalló intercambiando algunas "duras verdades" con el centrocampista tras perder en Anfield. Solo podemos imaginarnos esas verdades, pero Shearer afirmó públicamente que Barton había defraudado a él y al equipo.

Otro descuerdo en la plantilla del Newcastle involucra esta vez a Craig Bellamy y al exentrenador Graeme Souness. Las razones fueron muchas y estaban relacionadas con temas de dentro y fuera del campo, incluyendo una visita de Souness a la policía para sacar a Bellamy de apuros.

La tensión alcanzó su máximo nivel cuando en una ocasión Bellamy negaba con la cabeza a todo lo que Souness decía. Souness supuestamente incitó a Bellamy a que se pelearan, admitiendo en su autobiografía: "Ahí fue cuando lo agarré y le pedí que me acompañara al gimnasio. Cuando me fui de esa reunión, pensé, '¿Qué estoy haciendo? ¿Este es el trabajo que quiero hacer?'". Bellamy fue vendido meses después.

El legendario entrenador galés, John Toshack, era conocido por su enfoque bronco y por hacer mantener la disciplina en el equipo, pero nada lo podía preparar para lo que vendría en su primera época en el Real Madrid al intentar mantener a raya a Míchel.

Míchel amenazó a Toshack antes de que llegara al Madrid, afirmando que el nuevo entrenador tenía que pedir disculpas por los comentarios antimadridistas que había hecho en el pasado. La amenaza marcó el tono de la temporada, en la que Toshack tuvo problemas constantes por mantener el poder en el vestuario.

Este puede no estar al mismo nivel de fútbol que los anteriores, pero el encontronazo entre Leon Clarke y Paolo Di Canio durante su paso por el Swindon Town fue algo de lo que todo el mundo se hizo eco.

Durante el partido de la League Cup contra el Southhampton, el italiano agarró a Clarke de la camiseta y lo sacó del campo. Ambos se enfrentaron en el túnel de vestuario, y Clarke decidió no volver a jugar nunca más con el Swindon después de eso, uniéndose al Chesterfield una semana más tarde.