La lista de estrellas del deporte más icónicas de los 90
La década de los 90 marcó una era dorada en el ámbito deportivo, destacando el surgimiento de figuras icónicas cuyo impacto trascendió sus respectivas disciplinas. Desde la impresionante habilidad de Michael Jordan para "volar" sobre las canchas de baloncesto, hasta el incomparable dominio de Tiger Woods en el golf, aquellos años nos dejaron personalidades y momentos inolvidables. Presentamos a continuación una lista de los deportistas más emblemáticos de los noventa, clasificados desde el menor hasta el mayor impacto, dominio e influencia cultural.
Sampras fue uno de los tenistas dominantes de la década gracias a su potente servicio y enfoque estoico, que le sirvieron para ganar 14 títulos de Grand Slam. Su rivalidad con Andre Agassi enganchó a los espectadores y su excelencia inquebrantable lo convirtió en uno de los campeones más respetados de este deporte.
Warne revolucionó el mundo del criquet con su lanzamiento con efecto y toque de dramatismo. Su "Bola del Siglo" en 1993 es legendaria, y su personalidad magnética le valió para convertirse en la primera estrella global de este deporte, acumulando fans a lo largo de los cinco continentes. Warne fue tan querido que su funeral en 2022 fue televisado y visto por más de 1.000 millones de personas, tal y como recogía The Daily Mail.
El juego natural, la potencia de golpeo y la personalidad jovial de Griffeys lo convirtieron en uno de los jugadores de béisbol más queridos. Apodado como 'El Niño', jugó un papel fundamental en la popularización de este deporte en los 90, inspirando a los fans más jóvenes y creando un legado duradero en el béisbol. En 2009, Bleacher Report dijo de él que era el mejor jugador de béisbol de todos los tiempos.
Aunque Kournikova nunca llegó a ganar ningún título en singles, su personalidad llegó hasta portadas de revistas, anuncios y pantallas de televisión. Su carisma y atractivo general elevaron el tenis femenino a un nuevo nivel de visibilidad y la convirtieron en una celebridad mundial, demostrando que los deportistas eran capaces de cautivar al público tanto dentro como fuera de la pista.
La habilidad, estilo e influencia de Beckham se extendió más allá del campo de fútbol. Conocido por su lanzamiento de faltas y sus pases precisos, la estrella del Manchester United se convirtió en una celebridad mundial y un icono de la moda, ayudando a popularizar el fútbol en todo el mundo y allanar el camino para los futuros jugadores a conseguir éxito en muchas otras facetas profesionales. Que se casara con una de las Spice Girls también ayudó un poco…
Hamm fue la cara del fútbol femenino durante la década de los 90, liderando el equipo nacional femenino de Estados Unidos hasta la victoria del Campeonato Mundial de 1999, e inspirando a infinidad de jóvenes deportistas. Su habilidad, liderazgo y éxito contribuyeron a llevar el fútbol femenino hasta el foco público, convirtiéndose en una pionera no solo para el fútbol, sino para las deportistas femeninas de todo el mundo. La influencia de Hamm fue más allá del deporte e inició un movimiento que sigue creciendo hoy día.
Conocido simplemente como 'El Mejor', Gretzky elevó la NHL hasta nuevas alturas en los 90. Aunque consiguió la mayoría de sus éxitos en los 80, su presencia en Los Ángeles dio paso a un renacimiento del hockey, que inspiró a una nueva generación de fans y jugadores. Su visión, su inteligencia sobre el juego y sus inigualables estadísticas solidificaron su reputación como el embajador más importante de este deporte.
El jugado hizo honor a su apodo, 'Prime Time', al triunfar tanto en la NFL como en la MLB, demostrando en ambas ligas su incomparable atletismo y estilo. Sanders era un jugador electrizante y su destreza en los dos deportes era algo insólito para la época. Con sus icónicos touchdowns y golpeos excelentes, Sanders aportó un estilo rompedor a ambos deportes, algo que influenció a las siguientes generaciones de deportistas a no tener miedo a ser el foco de atención.
Seles dominó el juego tenístico de la época gracias a su estilo agresivo y potente, ganando ocho títulos de Grand Slam con tan solo 19 años. Éxitos que la convirtieron en la mejor jugadora en singles de la historia del tenis femenino, hasta que en 1993 fue apuñalada en la pista por un fan, hecho que la dejó traumatizada y que hizo que su carrera nunca fuera la misma, según destacaba The Guardian.
Conocido como 'El Rebelde', el estilo, toque y trayectoria accidentada de Agassi lo convirtieron en una de las figuras con más atractivo del tenis. Su rivalidad con Pete Sampras definió la década, y sus icónicos vaqueros cortos y pelo largo ayudaron a convertir el tenis en un deporte 'cool' para las nuevas generaciones. A finales de los 90, Agassi se estableció no solo como un campeón, sino como un icono del deporte, cuya influencia llegó hasta la cultura popular.
Shaq aportó una combinación de potencia y personalidad a la NBA. Una fuerza de la naturaleza en la pista, que era tanto un aliento para el público como una máquina imparable en el parquet. Su enorme carisma y personalidad lo convirtieron en un fenómeno de la cultura popular, aunque su dominio de juego en los Magic y los Lakers en los 90 también hizo que se cambiara la forma en la que jugaban los jugadores más corpulentos y llegaran nuevos aficionados.
Conocido como 'El Hombre Más Malo del Planeta', el poder aterrador de Tyson y su intensidad electrificaron el mundo del boxeo. Aunque su carrera estuvo plagada de altibajos, sus peleas eran eventos que no te podías perder. La figura de Tyson fue más allá del deporte, debido a su personalidad y estilo agresivo, que cautivó al público y lo convirtieron en uno de los deportistas de los que más se hablaba en los 90, especialmente después de que mordiera la oreja de uno de sus oponentes, tal y como informó en aquel momento ESPN.
El impacto de Schumacher en las carreras de Fórmula 1 en los 90 es innegable. Su dedicación incansable para ganar y su proeza técnica en la pista sirvieron para convertir la Fórmula 1 en un deporte mainstream que atrajo a una audiencia global más amplia. Gracias a sus victorias en los campeonatos de 1994 y 1995, Schumacher puso a Ferrari en un camino de éxito que pronto alcanzaría el estatus de legendario y motivaría a pilotos de todo el mundo.
Woods apareció como golfista profesional en 1996, y para 1997 ya era campeón de Masters. La potencia revolucionaria y el estilo de juego de Tiger no solo atrajeron a los aficionados; el golfista aportó una nueva energía a un deporte tradicionalmente conservador y su influencia lo transformó para siempre. Woods se convirtió en el más joven en ganar el Masters, dando visibilidad mundial al golf, que se convirtió en un escenario de prime time, y construyendo un nombre legendario para este deporte.
Michael Jordan no solo demostró dominar la NBA, sino que él ERA la NBA. Jordan llevó a los Chicago Bulls a la victoria del campeonato en seis ocasiones en los 90, redefiniendo lo que en baloncesto era la excelencia gracias a su tiro incansable, actuaciones decisivas y carisma que llegó más allá de las pistas.
La marca Air Jordan se convirtió en un fenómeno cultural y el eslogan 'Sé como Mike' fue el más emblemático de la década... ¡y no nos podemos olvidar de 'Space Jam'! Su legado permanece (casi) intacto como GOAT (mejor de todos los tiempos) en el mundo del baloncesto y como uno de los deportistas más comercializables de la historia.
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