Giro inesperado en el intento de chantaje a Schumacher

Los individuos acusados de intentar extorsionar a Michael Schumacher, leyenda de la Fórmula 1, y a su familia, expresaron su arrepentimiento durante el juicio celebrado en el Tribunal del Distrito de Wuppertal, Alemania.

El exguardaespaldas de Shcumacher, Marcus Fritsche (53), se ha presentado como acusado en el juicio junto a su hijo de 30 años, Daniel Lins, experto en Tecnologías de la Información, y su amigo, Yilmaz Tozturkan, de 53 años. Los tres hombres han sido acusados por la familia Schumacher de un intento de extorsión de 15 millones de euros (16 millones de dólares aproximadamente).

Revelan la verdad sobre los nuevos rumores que afectan a Schumacher

La familia de Michael Schumacher lleva cuidando del piloto desde que este sufriera un devastador accidente de esquí en 2013 en los Alpes franceses, que dejó a la leyenda de la Fórmula 1 con lesiones graves de por vida.

La familia Schumacher se ha mostrado muy protectora de Michael desde el accidente, haciendo todo lo posible para salvaguardar la privacidad del piloto. Desde lo ocurrido, no se han difundido fotos ni se han realizado entrevistas sobre el estado de salud de Schumacher, y la familia ha mantenido fuera del alcance de la atención pública los detalles sobre su recuperación.

Se dice que los tres acusados exigieron el pago de dinero después de que Fritsche fuera despedido de su puesto como guardaespaldas de Michael Schumacher en su residencia en Suiza en 2021, tras haber trabajado para la familia durante ocho años, según informaba The Mirror.

Sin embargo, antes de abandonar la residencia, Fritsche supuestamente realizó 1.500 fotografías, 200 vídeos del piloto y tomó nota de sus informes médicos, todo, según se le acusa, para utilizarlo como material en su plan de chantaje. El contenido robado mostraría a Schumacher en un estado muy vulnerable, en una cama de hospital y una silla de ruedas, tal y como señala The Independent.

Según ha citado The Daily Mail, Fritsche habría dicho lo siguiente sobre las acusaciones: "Asumo la responsabilidad. Hice una tontería". Según el medio alemán Heute, Fritsche dijo al abogado representante de la familia Schumacher: "Por favor, díganle a la familia que lo siento mucho".

La vista ha revelado nuevos detalles sobre lo ocurrido, incluyendo que fue la mánager de Schumacher, Sabine Kehm (en la imagen), el contacto principal del intento de chantaje.

Tras recibir numerosas llamadas de un número desconocido, Kehm finalmente habló "con un hombre que afirmó tener fotos de Michael, dijo que, si la familia no quería que estas se publicaran en la 'dark web', él podría ayudarles".

"Dijo que él era un intermediario, y que tendríamos que pagarle 15 millones de euros, dijo que el dinero era por las fotografías y por sus servicios como intermediario".

El misterio que se esconde tras el grave accidente de Michael Schumacher

El material robado supuestamente fue enviado a través de una dirección de correo segura creada por Daniel Lins para su padre, Marcus Fristche, en junio de este año. Los archivos fueron transferidos a la oficina de Schumacher en su residencia familiar en Gland, Suiza. Cuando recibieron el contenido, Kehm inmediatamente alertó a las autoridades. Dos semanas más tarde, la policía arrestó a Fristche, Lins y a su cómplice, Yilmaz Tozturkan.

Noah Tozturkan, el hijo de Yilmaz Tozturkan, dio una sensacional entrevista fuera de la sala del tribunal al medio alemán Welt, afirmando su inocencia… o al menos explicando por qué creía él que su padre era inocente: "El chantaje es cuando amenazas a alguien con violencia. Pero si voy ahora y digo 'Tengo algo aquí, quieres comprarlo', eso no es chantaje".

"En mi opinión es una propuesta comercial, concertada con abogados y contratos. No creo que sea chantaj", contaba Noah Tozturkan a Welt, tal y como recogía The Daily Mail.

Además de los tres acusados, también se ha visto implicada en el caso, que no imputada, en relación con el origen de las imágenes, una antigua enfermera empleada por la familia Schumacher.

Sabine Kehm (en la imagen junto a Corrina Schumacher) contó que tan pronto como vio las imágenes, sabía que tenían que proceder de alguien interno al círculo cercano de la familia, según detallaba The Daily Mail. Aunque Fristche había estado ocho años trabajando para los Schumacher, en el juicio se ha alegado que las imágenes podrían haber sido obtenidas de un tercero.

Kehm ha contado en el juicio que ella había tenido sospechas y algunos problemas con la enfermera, que supuestamente estaba muy unida a Fritsche, antes de que esta abandonara su puesto en 2020, según informó The Independent.

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